Varios artistas se unieron al llamado “Soy artista, no un gasto absurdo.” en las redes sociales, a minutos que se anunció la decisión de reducir el Gabinete ministerial, con el objetivo de ahorrar recursos e invertirlos en el fortalecimiento de la lucha contra el coronavirus. Es así que Deportes y Culturas y Turismo pasaron a depender del Ministerio de Educación, y el de Comunicación pasó al Ministerio de la Presidencia.
Claramente al oír esta noticia, los artistas, artesanos, gestores y creadores culturales no tardaron en pronunciarse y dieron a conocer su descontento. Sin embargo, ellos y ellas seguirán trabajando como siempre, gran mayoría desde sus casas, con o sin Ministerio de Culturas, ya que la entidad no es lo que les impulsa a ser artistas, si no su pasión. No habrá un Ministerio de Culturas, pero si hay mucho talento.
El 2% de la riqueza iberoamericana procede de la cultura, que emplea a dos millones de personas y en Bolivia se ve eso y a pesar de que en nuestro país es muy difícil vivir del arte, sin él, no habría risas, no habría entretenimiento, no habría sueños, ni imaginación, ni ideas, no habría identidad, ni valores y eso es lo que nos diferencia de otros seres humanos. Invertir en cultura es invertir en desarrollo ya que influye en todo, basta mirar más allá y notar que los países que invirtieron en cultura son los que gozan de un crecimiento económico y humano en la actualidad. La cultura juega un papel muy importante, así que, ¿que esperamos para dejar de ponerla en segundo plano e invertir en ella?
¡BUENAS VIBRAS!