Las noches durante el verano se hacen difíciles a la hora de dormir porque nos acompaña una pequeña serenata de zumbidos, pero como todo, esta situación tiene una explicación.
En lugares donde el clima es más cálido que frio durante todo el año, la vivencia resulta un poco incómoda en algunos momentos porque con altas temperaturas es inevitable tener las puertas y ventanas abiertas durante la noche para poder dormir bien. La parte mala de esto es que hay altas probabilidades de que escuchemos ruidos molestos de los insectos y que nos despertemos con marcas de picaduras en el cuerpo.

En la mayoría de los casos lo más molestoso es escuchar el zumbido de los mosquitos. Pareciera que les gustaría hacer ese ruido molesto cerca de nuestro oído y hacernos saber que ya están listos para darse un festín. Esta situación puede llegar a causar dificultades para conciliar el sueño, como también las picaduras pueden darnos dolores de cabeza porque aunque cada piel reacciona de manera distinta, no deja de ser algo incómodo.
La respuesta al por qué los mosquitos zumban al oído es simple; según el estudioso Nicolás Schweigmann, director del Departamento de Ecología, Genética y Evolución de la Universidad de Buenos Aires, al dormir las personas exhalan dióxido de carbono y los mosquitos se sienten atraídos por este gas que les sirve de guía, además de calor corporal, para localizar los cuerpos humanos en la oscuridad.

Ahora bien, si quieres evitar que los mosquitos se te acerquen, existe una forma muy simple: toma una ducha antes de dormir para darle frescura a tu cuerpo y evitar molestos visitantes nocturnos. La clave está en eliminar todo residuo de sudor, no tener necesariamente las ventanas abiertas y para evitar molestias procura hacerte de un mosquitero.
Buenas Vibras!
By: Alison Loza