Etiqueta: bajo mi sombrero verde

  • Petróleo y efectos adversos contra la Tierra

    Petróleo y efectos adversos contra la Tierra

    La actividad petrolera es uno de los pilares de la economía boliviana ya que las exportaciones de gas a Argentina y Brasil representan más de un tercio de las ventas totales al extranjero sin embargo estas prácticas fuera de resultar beneficiosas en el sector económico producen efectos dañinos sobre los ecosistemas y muchos de estos efectos son irreparables.

     En las distintas fases de la explotación petrolera y las practicas operacionales típicas de la industria petrolera se produce destrucción de la biodiversidad y del ambiente en general. Por otro lado, la quema de combustibles fósiles constituye la principal causante del calentamiento global.

    Las regiones tropicales son de vital importancia para la subsistencia de la humanidad ya que son parte importante para la estabilidad del clima mundial, estas aportan dos tercios de las 250.000 especies de plantas estimadas. La mayor diversidad de árboles registrada hasta la fecha es de 1.200 especies en 52 hectáreas del Parque Nacional de Lambir Hills, en Sarawak (Borneo). En general, se estima que los bosques lluviosos tropicales contienen entre el 50 y el 90 por ciento de todas las especies. Unas 2.600 especies de pájaros (cerca del 30 por ciento del total) dependen de los bosques tropicales y según la percepción de la industria petrolera la extracción en zonas tales como la Cuenca Amazónica, en los mares tropicales y en el Sudeste-Asiático resulta más económica.

    Sin embargo, para analizar los impactos de la industria petrolera en la biodiversidad no podemos limitarnos a analizar el impacto que el petróleo crudo tiene en cada una de las especies o en los ecosistemas, hay que entender como funciona la industria de la extracción petrolera en ecosistemas tropicales, pues para extraer petróleo del subsuelo, hay una serie de prácticas operacionales que alteran en equilibrio ecológico y afectan a las comunidades biológicas.

    Con frecuencia se cree que los “impactos directos” de la extracción petrolera pueden ser controlados con tecnología, y sólo permanecen mientras dura el proyecto. Estudios sobre el destino ambiental del petróleo demuestran que, aunque la toxicidad del crudo disminuye con la degradación (que puede ser biológica o física), este sigue siendo una fuente de contaminación y de toxicidad para los organismos presentes en un ecosistema por largo tiempo.

    Todas las otras fases petroleras requieren la construcción de infraestructura como plataformas de perforación, campamentos, pozos, así como la apertura de carreteras de acceso, helipuertos, oleoducto y líneas secundarias, lo que genera deforestación por dos causas: primero porque se clarea el bosque para instalarlas, y segundo para su construcción misma.

    La construcción de carreteras y oleoductos produce deforestación directa, por que se clarea el bosque, pero también porque la mayoría de carreteras son empalizadas con madera de la zona, extraída de árboles que pueden constituir especies endémicas, en peligro o que tengan una frecuencia de distribución muy baja.

    La contaminación petrolera en el suelo puede producir además el sofocamiento de las raíces, restando el vigor a la vegetación, y en muchos casos, matándola y la desaparición o disminución de poblaciones de micro­fauna del suelo.

    Cuando los contaminantes llegan a zonas cultivadas, se registran pérdidas en las cosechas, pues muchos cultivos mueren en contacto con el crudo, En otros casos la productividad del cultivo baja, lo que tiene serias consecuencias en la economía de los dueños del cultivo.

    Finalmente, la actividad petrolera en su conjunto produce una pérdida de fertilidad en el suelo, lo que impacta negativamente en las poblaciones humanas asentadas en la zona de influencia, y en la biodiversidad en general.

    By: Alejandra Lazo

    Bajo Mi Sombrero Verde

  • ¿LA NATURALEZA ES INFINITA?

    ¿LA NATURALEZA ES INFINITA?

    La naturaleza no es infinita, cada acción determina las consecuencias hacia todos los seres vivos, el pensamiento de que todo a nuestro alrededor seguirá existiendo, es una “ilusión” todo tiene un fin, y depende de todos como evitar ese final, la fauna sufre las consecuencias directamente de las acciones que se toman.

    Las causas de pérdida de biodiversidad según la fundación fundación Aquae son las siguientes:

    • Sobre-explotación del medio natural: el uso descontrolado de los recursos naturales.
    • Perdida de hábitats de las especies: la destrucción y modificación de los hábitats naturales, ponen en riesgo las especies que o habitan.
    • Contaminación del medio ambiente: la presencia de agentes contaminantes, en el agua, aire y suelo produciendo una alteración nociva para todos los ecosistemas.
    • Introducción de especies exóticas invasoras: estas especies son aquellas que producen cambios en los ecosistemas a los que llegan al desplazar a las especies que se encontraban en el lugar de manera natural.
    • Efectos del cambio climático: poco a poco este factor se puede volver una de las principales causas de biodiversidad.
    Foto: Anf

    Todas las causas, pueden evitarse llegando a evitar todas las consecuencias, los seres vivos de la naturaleza, cada función que cumplen es de vital importancia, las consecuencias de la pérdida de biodiversidad son las siguientes:

    • Extinción de especies: La alteración y destrucción de ecosistemas hace que muchas especies estén en peligro de extinción. Esto puede producir un efecto dominó, dado que la pérdida de unas especies puede conducir a la de otras, así como influir en el ser humano.
    • Aparición y extensión de plagas: Los desequilibrios en los ecosistemas pueden provocar la proliferación de plagas, que conducen a la destrucción de áreas vegetales.
    • Amenaza a la supervivencia del ser humano: La desaparición de la biodiversidad tiene una consecuencia directa en la vida del ser humano, ya que pone en peligro su alimentación, salud y bienestar.
    • Aumento de las emisiones de CO2: La biodiversidad del planeta juega un papel muy importante para el equilibrio de los ecosistemas terrestres y acuáticos, pero también para el aire y la atmósfera. La capacidad de los bosques y los océanos para absorber CO2 disminuye si sus ecosistemas se ven afectados y su biodiversidad, reducida.
    • Sequia: La pérdida de bosques tiene, entre otras, la consecuencia de que los árboles no pueden filtrar agua a los acuíferos, reduciendo el agua para consumo humano y creando zonas cada vez más áridas debido a la erosión del suelo.
    • Perdida del patrimonio genético: que ayuda a comprender mejor la naturaleza.
    Foto: Ecologíaverde

    El año 2019 se declararon que 24 especies estaban oficialmente extintas: cinco de plantas, cinco de peces, cuatro aves, cuatro mamíferos, tres de anfibios, tres de reptiles y de un invertebrado, si no se toman acciones necesarias este número puede seguir incrementándose, llegando a una pérdida total de cada especie.

    “Si tener alma significa ser capaz de sentir amor, lealtad y gratitud, los animales son mejores que muchos humanos” James Herriot.

    By: Alexander Balboa

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  • COMO DESECHAR LAS PILAS

    COMO DESECHAR LAS PILAS

    Las pilas son utilizadas por la mayoría, para elementos del hogar hasta juguetes, pero son uno de los elementos que contamina mas si no es desechada correctamente, “las pilas son dispositivos que convierten la energía química generada por la reacción de sus componentes en energía eléctrica”  (Valencia, 2019). Las pilas comunes tardan entre 100 y 500 años en degradarse, pueden contaminar 3000 litros de agua, por lo que son muy nocivos para el medio ambiente y la biosfera marina, la composición de la pila nos da la respuesta según la pagina ambientum, una pila tiene un 30% de metales pesados (litio, mercurio, plomo, etc.). Los metales que contiene una sola pila contaminan 40 litros de agua durante 50 años.

    “Las pilas recargables tienen una vida útil más prolongada que las comunes, y su proceso de desintegración es menor. No obstante, aún son contaminantes. Conscientes del problema, la Universidad de Binghamton y la Universidad Estatal de Nueva York unieron esfuerzos y desarrollaron pilas biodegradables, fabricadas con materiales 100% ecológicos. Además, han resultado ser tan eficientes como las normales” Margiory Salinas, redactora en jefe del sitio web Reviewbox.

    La manera correcta de desechar las pilas es la siguiente:

    Foto: Ambientum
    • sellar los 2 polos de las pilas con una cinta adherible
    • depositarlas en botellas de plástico de refresco, cerrando muy bien la tapa una vez que esté completa de pilas.
    • Depositarlas en lugares adecuados para su recogida

    By: Alexander Balboa

    Bajo mi Sombrero Verde

  • REUTILIZACION DEL ACEITE

    REUTILIZACION DEL ACEITE

    El aceite es una sustancia no biodegradable, que al llegar a ríos o mares perjudica a la vida acuática y propicia la proliferación de microorganismos dañinos para la salud. Ya que no se mezcla con el agua, se queda encima de ella, formando una capa que impide la correcta oxigenación de las aguas.

    Es uno de los ingredientes más usados al momento de cocinar, pero al terminar su uso no debes ser vertido en el desagüe, cada 1 litro de aceite puede contaminar mil litros de agua limitando su reutilización. También causa obstrucciones en las cañerías, esto ocurre debido a la mezcla con desechos químicos como suavizantes o detergentes, formando una capa gelatinosa en la que quedan atrapados residuos y también bacterias, ocasionando mal olor.  (Nieto, 2018)

    Fuente: La Republica

    También eleva los costos en el mantenimiento del sistema de drenaje y de las estaciones que se encargan de tratar el agua para usarla nuevamente. Se puede reciclar el aceite vegetal de la siguiente forma:

    • Reutilización del aceite. Lo primero que debes saber es que el aceite se puede reutilizar un par de veces antes de desecharlo. Espera a que se enfríe y con ayuda de un colador o filtro de café, elimina los residuos de comida. Úsalo un par de ocasiones más, cuidando de no combinar el aceite que usaste para freír pescado con carne o postres.
    • Reciclaje en casa. Cuando ya el aceite haya pasado por varios procesos de calentamiento, puedes usar los residuos para hacer velas caseras. Lo único que necesitas es el aceite usado, cera, aceite esencial y mecha para velas. Recuerda que también debes filtrar el aceite antes de hacerlas.
    • Recolección especializada. Finalmente, la opción más profesional para deshacerse del aceite de cocina usado es recurrir al servicio de empresas que se dedican a su recolección. De igual manera, algunas ciudades cuentan con contenedores especiales. Investiga si en tu municipio tienen este servicio. Podrías tener un contenedor de aceite de cocina usado justo a la vuelta de tu casa. (KIWILIMON, 2019)
    Fuente: Plueva

    By: Alexander Balboa

    Bajo mi Sombrero Verde

  • UN NUEVO AÑO DE INCENDIOS EN BOLIVIA

    UN NUEVO AÑO DE INCENDIOS EN BOLIVIA

    Bolivia ha ingresado a un ciclo no circunstancial, en el que los incendios vuelven a aparecer año tras año. Entre los meses de agosto y noviembre se ha hecho costumbre que los incendios ocupen un lugar importante en la agenda nacional y, junto a ello, la impotencia de ver cómo se van destruyendo millones de hectáreas de bosques, con los impactos socio ambientales que ello implica. Los años 2019 y 2020 ya habían sido los más desastrosos en ese sentido, pero ahora el 2021 se suma a esta lista de desastres en el país. En 2019 por la magnitud de las áreas afectadas por los incendios, fueron 5.3 millones de hectáreas quemadas, lo que implica que fue el año con mayor afectación por el fuego, en especial en el departamento de Santa Cruz. En cambio, en 2020, si bien la extensión territorial total afectada disminuyó, fue el año en que resultaron quemadas una mayor cantidad de áreas protegidas y bosques. Y este año, desde enero hasta julio ya se han quemado 749 mil hectáreas, según la ONG Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN).

    Los incendios tienen que ver no solo con el calentamiento global y el aumento de las sequías, sino también con un modelo productivo y un conjunto de actividades relacionadas, que imponen una gran presión sobre distintos territorios, incluso sobre algunos que no son considerados aptos para la actividad productiva.

    Normas que no ayudan

    El origen del incendio sigue siendo el más común de todos los años, el chaqueo. Bolivia cuenta con un marco jurídico que promueve o permite actividades incendiarias relacionadas con la ampliación de la frontera agrícola.

    Entre esta normativa está la Ley N° 337, de apoyo a la producción de alimentos y restitución de bosques de 2013; la Ley N° 502, de ampliación del plazo y modificación a la Ley N° 337, de 2014; la Ley N° 739, de modificación de las leyes N°337 y N°502, de 2015; y la Ley N° 952, de 2017. Todas estas consideradas como leyes del «perdonazo» del desmonte ilegal.

    En referencia a la normativa que permite directamente la quema, está la Ley N° 741, de autorización de desmonte hasta 20 hectáreas para pequeñas propiedades, del 2015; la Ley N° 1171, de uso y manejo racional de quemas, de 2019. Dentro de este paquete también está el D.S. N° 3973, que autoriza desmontes y quemas en el Beni.

    Fuente: Mongabay

    Poca ayuda para nuestros bosques y reservas

    A partir de los incendios forestales del 2019 en Bolivia pusieron en evidencia la falta de un plan de prevención y de presupuesto para gestionar las áreas protegidas. Algo que siempre ha sido una gran debilidad, la poca inversión y el caso omiso que se hace hacia nuestras áreas verdes.

    La institución Sernap comenzó funcionar en la década de los 90 con financiamiento internacional para los primeros 15 años. El compromiso del Estado boliviano era trabajar en estrategias financieras de autogestión a largo plazo. Algo que nunca se logró. En noviembre de 2019, el déficit era de 22 millones de bolivianos. En 2020 por la pandemia los 14 parques nacionales habilitados para el turismo dejaron de recibir visitantes. Se estima que solo la Reserva Eduardo Avaroa, perdió 7,7 millones de bolivianos, según un documento de la Dirección de Planificación del Sernap. Durante siete meses ningún área nacional recibió dinero para gastos operativos del Estado. “En muchas de ellas el tema logístico lo solventaba el apoyo de ONG, instancias amigas, comités de gestión, o el propio personal que con sus recursos financiaba gasolina”, asegura Miranda (la antigua directora de Sernap).

    Durante un año, entre noviembre de 2019 y noviembre de 2020 para poder sofocar los incendios se tuvo que recurrir a empresas privadas, a las gobernaciones y municipios de cada ciudad y a distintas ONG´s para poder recibir alguna ayuda económica. Según Miguel Ángel Sardán ex director del Área Natural de Manejo Integrado (ANMI) asegura que se acostumbró a “no pedir fondos” al gobierno, porque “es una pérdida de tiempo”.

    Respecto al Presupuesto Operativo Anual (POA) 2021, Teodoro Mamani, director del Sernap, la institución recibe del Tesoro General de la Nación (TGN) solo el 23 % de los recursos que necesita, “nada más para los sueldos”. El resto llega del apoyo de Países Bajos. “La Unión Europea nos está apoyando con 14 millones de bolivianos, por lo que uno de nuestros objetivos es gestionar más recursos económicos”.

    `Foto: CNN en Español

    Bolivia viene de una crisis política, y sumándole a ello, la crisis sanitaria por la que atraviesa aun la población mundial. Gracias a la mala organización política, se vieron afectados también nuestros bosques. Varias autoridades de Sernap, científicos, organizaciones ambientalistas y expertos, temían que esta decisión esté asociada a la necesidad de impulsar la economía sin tomar en cuenta el medio ambiente y la temporada de incendios. Ya se tenía previsto que este no iba a ser un buen año, en enero según Carlos Pinto, gerente de proyectos de manejo de fuego de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) señaló: “Este año se perfila como complicado climáticamente. Hay que estar atentos para ver los escenarios (de incendios). Con dos años de actividad productiva paralizada por la crisis política y la pandemia, ahora en 2021 todos van a querer salir a producir”, dijo.

    Mientras las condiciones climáticas y los recientes incendios anuncian un año crítico más para los bosques de la Chiquitanía, otras condiciones agravan aún más la situación, los recientes monitoreos satelitales que indican el incremento de los focos de calor según el último reporte del monitoreo satelital del Centro de Planificación Territorial Autonómica (CPTA) del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis) da cuenta de ello. Según el informe de junio de 2021, para territorios indígenas y áreas naturales protegidas se registró 15.815 focos de calor en todo el país, una cifra que duplica los 7.199 focos de calor registrados en el mismo mes de 2020.

    By: Daymira Canales

    Bajo mi Sombrero Verde