A ciencia cierta no hay un origen concreto de como se inició con la preparación del “sonso”. No obstante, hay un peculiar cuento que se escucha en las selvas del departamento de Santa Cruz.
La historia nos narra a Gabriel, el tonto del pueblo, quien balbuceaba las palabras y apenas se hacía entender con personas no habituadas a su particular habla.
Un buen día se apareció en la estancia cuando doña Olinfa preparaba masaco y como estaba sola decidió que el tonto le ayude con el manutacú. Le indico como golpear y mezclar los ingretientes; así ella se fue a hacer otros que haceres. Luego de un tiempo se acordó del muchacho y fue a mirar en que quedó el masaco de yuca con queso. Vio al muchacho entusiasmado dándole con ritmo de taquirari al tacú, el masaco quedó sonso, pero rico. Desde esa vez en el pueblo se asocia y se recuerda al tonto que supo hacer reír y compartir con una comida deliciosa; fue así como nació el sonso.
Los ingredientes de esta delicia oriental.-
Muchos bolivianos tienen su forma de preparar este platillo oriental, que es ideal para la hora del café o como un aperitivo a media mañana; algunos lo preparan con huevo, con jamón para darle más sabor y color, otros le ponen diferentes tipos de queso, también carne molida, mantequilla, leche, etc. Pero el “Sonso” original se vende en varillas de madera cocinado en leña; en las calles de Bolivia se prepara con yuca (un tubérculo que crece y se cultiva a lo largo de América Latina), queso criollo sin sal, 1 taza de leche, 1 cucharadita de sal y mantequilla.
Una preparación diferente.-
Fuente: azafránbolivia.com
En la preparación de esta delicia, la estrella es el tacú, un mortero de madera de más o menos un metro de alto, tiene diferentes usos: moler maíz, moler yuca, moler ají, hacer masaco, moler carne, café, etc. Sin embargo los bolivianos que no son del oriente y no cuentan con un tacú, se han dado formas de preparar este singular platillo; algunos usan un pisa papas para aplastar la yuca, otros la raspan para que sea más fácil de manejarla o simplemente la aplastan con un tenedor.
Para la elaboración, primero se debe hervir las yucas peladas en abundante agua con sal, la yuca tardará alrededor de 50 minutos en cocerse. Una vez cocidas se debe retirar el corazón y se procede a molerlas. Se debe moler ligeramente las yucas y agregar mantequilla, seguida del queso y continuar moliendo. Según la masa lo vaya requiriendo agregar chorros de leche hasta que quede una masa suave y con pocos grumos.
En el oriente boliviano la manera de cocción puede ser a las brasas en la cual la masa no debe quedar muy húmeda, para que esta no se caiga del palo, si la cocción es en el horno este debe estar a 200 °C, durante alrededor 20 minutos aproximadamente, también se puede hacer la cocción en un sartén con una buena cantidad de aceite durante 5 a 7 minutos.
El momento perfecto para disfrutarlo.-
Fuente: tapiocayuca.com
Para disfrutar de un buen sonso, no hay un momento en específico, es el mejor acompañante del café, sin embargo se puede acompañar con ensalada, con chocolate caliente, o simplemente puede ser comido solo, para disfrutar su sabor de una manera más natural.
Buenas Vibras Bolivia, hace la invitación a sus lectores y espectadores, preparar esta delicia cruceña, y compartir el resultado en nuestras redes sociales.
¡Buenas Vibras!