La danza que conocen en todo el mundo como La Diablada representa y nos muestra la lucha entre el bien y el mal, representado en disfraces al Arcángel San Miguel en una disputa con los demonios, los mismos representan los siete pecados capitales, liderados por Satanás, junto al oso jukumari y el cóndor andino los cuales llegan a ser el significado de la fertilidad y la lucha.
Una danza de la cual no se sabe su procedencia, existió una disputa entre los países vecinos de Perú y Bolivia, donde el país tricolor reconocía a La Diablada como suya por la historia, la trayectoria y el reconocimiento que se le fue otorgado a esta bella y tan dinámica danza. En cambio, el país peruano muestra supuestos datos históricos que ponen a Puno como la ciudad artífice de la creación y motivación a que distintos países latinoamericanos muestren a La Diablada como una danza. Al final de todo el conflictó que se suscitó en altos mandos internacionales no se llegó a un punto final. Hasta el día de hoy esta representación del bien y el mal es bailada en 3 países, Bolivia, Perú y Chile, teniendo el mayor peso el país boliviano, el cual le brindó un reconocimiento adecuado a nivel mundial, gracias a las distintas entradas folclóricas en todo el territorio, en especial la del Carnaval de Oruro, el mismo que atrae a miles de turistas de distintos países y continentes, la magnitud y la diversidad de colores que se muestran es la oportunidad de ver a La Diablada y muchas otras danzas en su máximo esplendor.
Existen varias entradas folclóricas donde se puede llegar a admirarla, entre las que más resaltan y tuvo miles de espectadores fue en el ya conocido y famoso Carnaval de Oruro, en pocas palabras fue gracias a esta entrada por la que recibió el reconocimiento que tiene, entre otras podemos encontrar a la entrada del Gran Poder ubicado en la Ciudad de La Paz, ambas ciudades están ubicadas en Bolivia y la fiesta de la Virgen de Candelaria ubicada en Puno, Perú.
Un baile el cual capta la atención de muchas celebridades, personas y organizaciones llegó a ser un ícono a nivel boliviano, latinoamericano y mundial. Presentado en distintos concursos, documentales, certámenes de belleza, etc. Lleno de historia y trascendencia al pasar del tiempo es sin duda una danza la cual vale la pena bailarla, admirarla y darle el respeto y reconocimiento que se merece donde sea que sea representado por cualquier de lo países que lo lleve.
By: Camilo Oporto
¡Buenas Vibras!