El negocio de la comida rápida siempre ha sido uno de los mayores generadores de dinero en todo el mundo, pero debido a la pandemia también se ha visto afectado.
En muchos países la actividad gastronómica se considera la base de la economía. Esta situación es fácil de evidenciar en las noticias, documentales, incluso en las películas vemos que hay muchos restaurantes de lujo en los que tenías que hacer reserva previa de una mesa; por otro lado, los puestos callejeros en los que las personas solían hacer largas filas para poder ganar un lugar y poder disfrutar de la buena comida.
Las costumbres gastronómicas quedaron en pausa porque era necesario replantear el funcionamiento de los establecimientos para que no genere grandes pérdidas económicas. Aunque es bastante claro que se necesita un buen equipo de logística para que pueda existir un manejo adecuado del dinero, mercancía y entrega del producto. Parte de lo anteriormente dicho influyó mucho en el cierre de muchos restaurantes porque no supieron utilizar los recursos que tenían para continuar produciendo en esta época.
Otra actividad económica que no es ajena a este tema es el turismo; esta actividad en conjunto con la gastronomía se basa en la interacción de persona a persona y por obvias razones se vio afectado. A esto se suma el contexto actual referente a la la tensión política, social y un comportamiento anormal de la oferta y demanda para las grandes industrias de comida.
La experiencia que teníamos antes de la pandemia cambió radicalmente, ya no hay más citas con los amigos o con nuestra pareja para compartir una cena, un helado, un almuerzo. Ahora todos los comercios permanecen cerrados al público y solo cumplen sus funciones mediante las entregas a domicilio. Las medidas que adoptarán los restaurantes cuando llegue el momento de reabrir sus puertas y cómo estas moldearán la experiencia gastronómica para adaptarse a esta nueva realidad, dependerá de las nuevas medidas de bioseguridad que serán adoptadas en cada país.
Los puestos callejeros han dejado de salir por las tardes y por las noches, desde la dinamización de la cuarentena en Bolivia se los puede visibilizar desde las mañanas. Los negocios realizaron subcontrataciones en empresas de delivery. Las personas están haciendo lo posible por respetar el distanciamiento físico.
Todo significa una readaptación a un nuevo estilo de vida, que aunque no dure mucho, nos habrá enseñado la importancia del cuidado de la salud, el valor del amor y la amistad.
¡Buenas Vibras!
By: Alison Loza